martes, 30 de junio de 2009

"Think tank" popular y democrático.

Hay expresiones que por su acertada descripción triunfan a la primera. Muchos de mis amigos me preguntan como puede gustarme Enrique de Diego. A mí, viejo socialista utópico, fiel discípulo de viejo profesor, otro Enrique por mas señas. Creo que el éxito de Enrique de Diego ha sido crear un "think tank" tremendamente popular, donde todo el mundo deposita anhelos y desesperanza, propuestas imposibles y vocaciones latentes, como en el viejo dicho del fútbol, todos llevamos un político dentro. Ha conseguido, de momento, un denominador común, el descontento. El mismo se reconoce un voceador panfletario, creador de un opúsculo populista y machacón. Creo que dispone de un intelecto suficientemente asentado para no sublimarse en mesías.
Este país, en este momento, necesita a D. Enrique de Diego, necesita la Plataforma de las Clases Medias y necesita un apostolado fiel que haga llegar su palabra a los rincones del pueblo. Es, Enrique de Diego, el catalizador necesario para que todo el descontento se oriente en una sola dirección. La regeneración política del país.
Digo regeneración, no revolución. No necesitamos salvapatrias, ni mesías. Necesitamos políticos honrados, con sentido común y un cambio en la estructura política del país.
La Plataforma de las Clases Medias entra en una fase peligrosa. Mucha gente quiere posicionarse, ¿con vistas a qué? 
La Plataforma debe seguir siendo el perfecto "think tank", el oráculo desde donde parta la regeneración, el ideario. No debe convertirse en Partido Político, por el contrario, dejad que los Partidos se acerquen a mi. Seamos un Lobby de presión, tan fuerte, con tantos votos, que se nos tenga en cuenta.
Doy tanta importancia a mi voto que no necesito cargos. Estamos sobrados de politicos, lo que necesitamos son votos reflexivos. Él, mi voto, con otros muchos, tan importantes como el mio, cambiaremos esto. Tal vez nos cueste, pero lo lograremos. Si quieres ser uno más, no lo pienses, une te. De este "think tank", de un debate creativo y posibilista, nacerán nuestros futuros apoyos capaces de la regeneración que propugnamos.

Ahora una nota negativa. He notado que han desaparecido los originales y auténticos logos de la Plataforma de las Clases Medias en www.clasesmediasaragon.es. Se habla de partidos liberales, siglas, reuniones, ¿Empieza la carrera por el puesto?

Mi blog es humilde y poco visitado, pero al menos compañeros de ideas deberían leerme. Agradecería algún comentario, para tomar decisiones. Gracias.

martes, 23 de junio de 2009

Carnaval

Ya he tomado una decisión. Bueno, en realidad, no puedo hacer otra cosa. Voy a prepararme para el apocalipsis. Nuestro país presenta un estado comatoso. Llegará un momento que el coma hará crisis y devengará en algo nuevo. Algo nuevo. Esto es lo que nos espera, algo nuevo. ¿Como será?
Los datos económicos son malos, pésimos. El turismo se desploma, el consumo hace tiempo que se desplomó, el desempleo sigue ascendiendo y una extraña preocupación por flexibilizar el mercado laboral sigue llenando paginas y debates. Por todos lados surge la demagogia y los análisis interesados, datos sobre corrupción y malversación nos bombardean día a día. Todo el mundo opina que padecemos una clase política de deshecho de tienta, iletrados, analfabetos funcionales, pero diestros en el manejo de asambleas de barrio y empujones laterales. Diestros en la malversación, el cohecho, el nepotismo, la soberbia, la mentira y, sobre todas las cosas, ignorantes, incapaces y marrulleros.
Todos estos pecados políticos, deleznables, son nuestra única salvación. Por este lado hará crisis nuestro comatoso país. No hay encefalograma plano, quedamos ciudadanos con capacidad crítica, pero solo podemos hacer una cosa.
Esperar en nuestra puerta el paso del cadáver del enemigo. Ellos mismos cabalgan desbocados hacia el precipicio, solo nos queda ir preparándonos para una dura y costosa reconstrucción.
No soy pesimista. Es lo que hay. No pueden parar, ni lo intentarán, caerán por el precipicio bien amarraditos a su caro sillón de cuero. Es nuestra salvación, así que si podemos empujarles un poquito, hagamoslo. 

lunes, 8 de junio de 2009

La vida sigue igual

Como era de esperar, los irreductibles ortodoxos de los partidos mayoritarios se han pasado por
las urnas. Poco importan los escándalos de corrupción. Pasemos por alto la deplorable situación económica, los millones de parados, el fracaso de la educación... todo esto no importa, millones de afiliados, funcionarios, liberados, prejubilados y jubilados (Virgencita, virgencita que me quede como estoy), se han pasado por las urnas y parece que han dejado muy contentos a sus lideres políticos, al menos les han otorgado una prórroga para sus desmanes y corruptelas. ¿Y, ahora qué?¿Cual és el valor del silencio? ¿De la abstención, meditada y educada? ¿Qué camino nos queda a los que nos abstuvimos?. 
Oigo por todos lados "Si no has votado no tienes derecho a quejarte" ¡¡Coño!! Como los gitanos en tiempos de los Reyes Católicos, FUERAAAA.
Tengo que recomponerme, buscar mi sitio en una sociedad demasiado parecida a la italiana. Nuestros próceres se encargarán nuevos trajes, (a nuestra salud) seguirán mareando la perdiz y esperando que escampe, mientras viven de "puta madre" y contemplan desde sus alturas, con sonrisa sardónica,  a un pueblo bobo de solemnidad.
En fin, sigamos con lo nuestro. Zapatero, ríndete te tenemos rodeado.

miércoles, 3 de junio de 2009

Jueces

Hubo un tiempo en el que los más sabios y experimentados ancianos de la comunidad se encargaban de otorgar y hacer Justicia. No había Leyes, solo tradiciones y sentido común. Venerables miembros de la comunidad se hacían respetar sentencia a sentencia.

Semánticamente, la palabra Justicia tendía hacia la sublimación, era una palabra importante. Incluso Juez, mantenía ese aire venerable y respetuoso de quien sabe impartir ética y equidad.

Funcionario (de funcionar): Persona que desempeña un empleo público.

Juez. Funcionario. Oposición. Hincar codos y litros de cafeína. De vez en cuando, uno de estos se merece realmente el cargo, pero lo normal es encontrarse unos mendrugos, duros de mollera, que se creen con derechos sobre haciendas y personas. Enfundados en sus togas, para emitir una imagen de respetabilidad que no tienen en vaqueros, escudados en un endogámico corporativismo, cometen tropelías a diestro y siniestro todos los días del año. Son dóciles, nada independientes, viven a la espera de un ascenso o un acta de diputado y tratan a sus administrados como ganado… de la peor especie (algo habrán hecho)

Se equivocan, de cabo  a rabo, en todo. En su percepción de la Justicia, en la aplicación de ésta, en su corporativismo doloso.

No son necesarios los ejemplo, basta oír las noticias, leer periódicos, para comprender la grave degradación funcionarial que sufren las instituciones de nuestro estado. La justicia (ya no se merecen la mayúscula), la política, la educación, la iglesia. ¿Dónde ponemos la esperanza?

Yo todavía confió en la gente, en una sociedad envejecida, dicen, cargada de sentido común y que un día deberá decir, bien alto ¡BASTA!