El 19-J es la fecha. Nuestros jóvenes se han implicado. Pelean por ellos, pero también por todos nosotros. Es el momento de no fallarles, de estar junto a ellos codo con codo. Ellos se han puesto en primera linea y reciben los primeros golpes, pero que sepan que tras ellos hay toda una sociedad harta, indignada, que los apoya hasta el fin.

Luego habrá mas días, mas fechas, no va a ser fácil, pero todos juntos lo lograremos.

Ya basta de memos, chorizos y mangantes. Hay que cortar este despilfarro, este desiderátum al que nos han conducido Ayuntamientos, Diputaciones, Comarcas, Veguerías, Autonomías, Sindicatos, ONG's de dudosa legalidad y miles de empresas publicas en perdidas, refugio de mamones y pseudo-funcionarios de desayuno, almuerzo y vermut y nula productividad. Si en la Telefónica sobran 6.500, en la Administración sobran 40.000, así que manos a la obra.

Queremos escoger y votar a nuestros políticos conociendolos, cara a cara. Escoger hombres/mujeres validos, honrados y con ideas de regeneración. Abominamos de siglas y castas endogámicas, donde el cargo pasa de padres a hijos, sobrinos o asociados.

Nuestra casta política hoy, es repulsiva. Dicen que no todos son malos, que hay políticos buenos. Desde el momento que un individuo, al que se le supone criterio y formación, se limita a decir "sí, bwana" y apretar el botoncito tragándose su dignidad en beneficio de su poltrona. Ese político, no es bueno. No hay ninguno bueno. Ninguno.