martes, 13 de octubre de 2009

Indigentes

Vamos camino de la indigencia económica. Nuestras costumbres de consumo se están revisando (que se lo pregunten a las grandes superficies), sin embargo, cada día veo mas Infinity y Lexus, Mercedes y BMW (¿Altos funcionarios? ¿ Políticos? ¿Constructores?). Con toda seguridad, indigentes. Indigentes morales. Por que en este país, al que empieza a preocuparle la economía, hace tiempo que campa por sus respetos la indigencia. Una indigencia autista, social, cultural, moral.
Un buen ejemplo de mi aserto, son nuestros políticos. No hay por donde cogerlos, se merecen el suspenso con orejeras de burro y meses de cara a la pared.
Nuestra juventud, a golpe de chat y sms, reniegan de la cultura mas primaria, leer y escribir. Si, encima, añadimos sus costumbres respecto al alcohol y la fiesta, el panorama no puede ser mas desolador. No olvidemos que estos jóvenes serán padres y madres de familia y tendrán que educar a su vez. Y, sus mejores expectativas pasan por lograr ser funcionarios o políticos.
No cabe duda que esta sociedad necesita un rearme moral, una vertebración social comprometida con sus congéneres. Necesita lideres en los colegios, en los mercados, en el barrio, en los sindicatos, en las empresas. Mas que lideres, mártires. La tarea se me antoja difícil para ser afrontada por una juventud cómoda, mal acostumbrada y sin referentes morales sólidos.
Dios nos coja confesados.

1 comentario:

Javier dijo...

Creo que la batalla, pero no la guerra, se perdió el día que la máxima "educan los padres y forman los profesores" se rompió.

Un saludo.