sábado, 1 de agosto de 2009

Una buena oposición

La música militar es... buena para los desfiles militares. Mala, muy mala, cuando suena en programas de debate político.
Soy un seguidor persistente del programa "A fondo". Inicialmente me atrajo su oposición clara y contundente a un estado político lleno de defectos. A ido pasando el tiempo, lunes, martes...., los formatos se repetían. Los contertulios se repetían, las ideas se fosilizaban. Ultimamente, no se si por culpa de los calores estivales, por el cansancio que produce predicar en el desierto, he empezado a oír trompetas y fanfarrias, (Hice la mili en Infantería, hace 40 años que no oía su himno). Le escuche con nostalgia, pero cambie de inmediato el dial. Volví al día siguiente, disculpando el acaloramiento, nimio por otra parte. Y de nuevo regresaron las trompetas y las fanfarrias.
Mal camino hemos tomado. Peor futuro nos espera si nos echamos al monte enarbolando banderas y fanfarrias.
Ahora se llevan otras cosas, "brainstorming", "think tank". La idea, la opinión, la razón, se comunica con palabras. Sr. De Diego, es usted un hombre de letras y palabras, utilicelas bien y olvide las arengas militares. Reconozca que ellos tienen el mando, nosotros (me incluyo en su equipo) somos la oposición y solo tenemos una posibilidad de ganarles. Somos intelectualmente mas fuertes y tenemos razón. Sigamos predicando con esfuerzo, con nuevas palabras, mejores ideas y actitudes democráticas.
De esta manera si los tendremos rodeados, con tambores y banderas, no lo creo.

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